Tipos de acoso escolar El acoso escolar se divide en dos categorías:
Por ello, el maltrato entre compañeros puede aparecer de formas muy diversas. Las más comunes son:
Fenómeno bullyingResulta complejo definir el fenómeno "bullying", y más aún traducir literalmente este vocablo inglés al español. Implica muchas veces el agredir físicamente a otros compañeros de clase, hacer burlas, etc. Dichas situaciones resultan bastantes comunes en los centros educativos (colegios e institutos), y pueden llegar a ser muy dañinas para quienes las sufren, generalmente en silencio y en soledad. La palabra "bullying" (pronunciada aproximadamente como: "bulin") se utiliza para describir estos diversos tipos de comportamientos no deseados por niños y adolescentes, entre los que destacan bromas pesadas, ignorar deliberadamente a alguien, ataques personales, e incluso abusos serios. Quien hace el "bullying" puede ser un individuo o un grupo (pandilla). El término surge de la palabra en inglés "bull" que significa literalmente toro; de ahí se deriva que es una criatura fuerte y que atropellar a otros más débiles y pequeños. Lo más importante no es la acción en sí misma, sino los efectos que produce entre sus víctimas. Nadie debe subestimar el miedo que un niño, niña o adolescente intimidado puede llegar a sentir. Por tanto, estas situaciones de acoso, intimidación o victimización son aquellas en la que un alumno o alumna está expuesto, de forma repetida y durante un tiempo, a acciones negativas que llevan a cabo otros compañeros. Por acciones negativas entendemos tanto las cometidas verbalmente o mediante contacto físico, como las psicológicas de exclusión. No hay que confundir estas situaciones con los típicos altibajos que se producen en las relaciones entre los alumnos, especialmente a lo largo de la etapa de la adolescencia y pre-adolescencia. ¿Quiénes son responsables?Los profesores y los padres tienen una responsabilidad especial en el cuidado de niños y adolescentes, y eso incluye ayudar a quien es víctima de estas conductas no deseadas en la escuela. Sin embargo, los adultos no pueden hacerse cargo estas tareas sin la ayuda de los propios niños y adolescentes. La situación tiende a complicarse cuando el "Bully", o sea la persona que ejerce el abuso, amenaza a la víctima para mantenerla callada y evitar que pida ayuda o sufrirá peores consecuencias. Cuando alguien está siendo víctima del fenómeno "bullying" en un centro educativo, el resto de compañeros que no están implicados directamente sí saben sobre lo que está sucediendo en el aula, en el recreo o en la calle. Aunque ellos no estén envueltos, podrían ayudar a quienes sufren estas conductas no deseadas. La educación es un punto muy importante para que no se llegue a esta situción de niños acosados por otros. ¿Qué hay que hacer en estos casos?Si nos encontramos ante un caso de acoso o "bullying", debemos intentar convencer a la víctima de que recurra a la ayuda de sus padres y profesores y denunciar cuanto antes dicho estado. Si el acosado no quiere colaborar a solucionar el problema, la situación se vuelve más difícil. Para ayudarlo, se le tiene que demostrar que puede contar con ayuda de los mayores en cualquier momento, y así, irá recuperando la confianza y, con el tiempo, superar esta situación. Para que esto funcione, generalmente, es indispensable el apoyo y la amistad de un cierto número de personas que le defiendan de sus enemigos. Ejemplos concretos
Cómo enfrentar el matonaje escolar |
Un análisis crítico que podemos formular, es la actual sistematización que existe en los colegios para adoctrinar a los estudiantes, de manera que las clases se tornan monótonas e inconsecuentes con los verdaderos fines educativos.
La relevancia que tiene para un niño estar aprendiendo en una sala de clases en donde se premie la tranquilidad y el silencio, es bastante significativo.
El poco dinamismo que existe en la escolarización actual en la mayoría de los establecimientos, deja bastante que desear, ya que la motivación de los niños pasa por un mero condicionamiento negativo, es decir, el alumno se prepara no para aprender, sino más bien, para no obtener malas calificaciones, lo que es un verdadero reflejo que el interés de los niños no pasa por querer aprender de forma intrínseca; biológicamente hablando,los factores distractores que también dificultan la educación de calidad es en su mayoría,el silencio en el ambiente, ya que en situaciones adversa, no se logra una concentración adecuada, de manera que se daña además, el sentido de la audición.
También uno de los puntos de gran relevancia es que estar ocho horas como promedio sentado, fomenta las enfermedades del sedentarismo y de la poca autonomía que hay en base a nuestras necesidades como seres humanos.
Mencionaremos también la obesidad como una enfermedad de responsabilidad del currículum escolar, ya que los niños se exponen a muy pocas actividades físicas, con esto aumentan enfermedades tales como : hemorroídes, estitiques, enfermedades en la bejiga, esfínteres, riñón, y porqué no nombrar, el estrés, que también es un factor que produce a lo largo del tiempo, agresividad tanto de los alumnos, como de los profesores, en el cual, todas las metodologías para controlar el grupo, quedan completamente obsoletas.
Quizás el principal motivo de la violencia en los colegios y por consiguiente dentro del aula, pasa más que nada, por la poca afectividad entre docentes y alumnos, lo que genera un ambiente hostil y frío en las relaciones humanas.
Los docentes deben tener en consideración que la base de una buena enseñanza, se formula a través de las relaciones humanas que puedan establecerse entre los principales actores del proceso de enseñanza-aprendizaje, además de tener en cuenta los procesos biológicos y psicológicos de los alumnos, tomando en consideración por sobre todo, el desarrollo psicoafectivo, como detonantes de cualquier dificultad cognitiva y afectiva.
Es allí donde además de crear lazos de confianza, se afiata en gran medida el respeto, que no es autoritario, sino más bien, afectivo y comprometido. En este proceso los alumnos son capaces de sentirse partícipes en cada suceso procedente del método educativo, pero principalmete, son capaces de reflejar en sus docentes, un apoyo incondicional ante cualquier circunstancia, que pueda anteceder sus vidas.
A partir de esto, es posible detener cualquier acto de violancia y el mal clima que lamentablemente se genera en las escuelas de hoy en día.